viernes, 28 de enero de 2011

ACCIONES DE FORMACION PARA EMPRESARIOS - GERENTES DE PEQUEÑAS EMPRESAS. REQUERIMIENTOS

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El diseño de las acciones de Formación debe siempre tener en cuenta los requerimientos especiales de los empresarios-gerentes de las pequeñas empresas, entre los cuales están incluidos los siguientes aspectos:

Dada la gran demanda de tiempo personal y su inmersión en el manejo del negocio, no pueden ausentarse durante períodos largos. Les resulta difícil y oneroso (según los costos de oportunidad perdidos) asistir a actividades de capacitación que duran días o semanas y los alejan demasiado tiempo del negocio.

Como personas prácticas que son, están más acostumbrados a aprender en la acción y no sentados pasivamente en un aula. Prefieren las herramientas y técnicas de aplicación inmediata.

Debido a limitados recursos financieros, muchos empresarios gerentes, sobre todo los que tienen negocios más pequeños, tienen una capacidad reducida para pagar programas de capacitación excesivamente caros.

La Formación debe diseñarse e implementarse de acuerdo con el estilo de los empresarios-gerentes, debe ser modular y basarse en el principio de aprender haciendo, con métodos ampliamente participativos, fundamentales siempre para el aprendizaje eficaz de los adultos.

Los servicios de formación son más eficaces cuando los llevan a cabo personas allegadas. Además de sus competencias como formadores y conocimiento de la pequeña empresa, conviene que compartan los valores, lenguaje y actitudes de los participantes.

Es poco probable que personas o instituciones que proyectan una imagen de superioridad o indiferencia tengan éxito con ellos.

Los formularios que se distribuyen, para recoger las reacciones de los participantes al final de las actividades de formación, sólo proporcionan algunas ideas sobre sus opiniones inmediatas. Para evaluar el verdadero impacto de la capacitación, se requieren contactos de seguimiento, que permitan además detectar las necesidades de formación adicionales.

La Capacitación debe adoptar un enfoque básicamente comercial; quienes la brindan deben plantearse las mismas preguntas que las personas de negocios, como por ejemplo: ¿quiénes son nuestros clientes?, ¿en qué se interesan?, ¿qué servicios requieren?, ¿cómo podemos llegar al mercado?, ¿cómo se organiza un sistema de entregas puntuales?, ¿cómo supervisamos y evaluamos nuestro trabajo?, etc.

Hay que suministrar a los participantes material didáctico adecuado como respaldo a su memoria y futura referencia, y que les indique los pasos a seguir para la aplicación práctica de lo que aprendieron.

Dentro de lo posible, hay que usar una combinación de Formación y Asesoría.

Hay que diseñar la estructura, el formato y el proceso de Formación para poder llevar a cabo el programa en horarios convenientes, que se adecuen mejor a los participantes.

Hay que establecer una buena relación con los alumnos y ganar su confianza, prestándoles la debida atención, facilitándoles la comunicación y entablando con ellos un intercambio sólido basado en un buen conocimiento del negocio y en información fiable.

Hay que tener una adecuada comprensión de los procesos empresariales y de gestión que entrañan las diversas etapas de la evolución de una pequeña empresa y saber relacionarlos con las competencias requeridas en el empresario-gerente.

Hay que utilizar casos, ejemplos y situaciones problemáticas extraídos de los propios participantes como punto de partida para el debate, o ilustraciones de la aplicación de técnicas específicas de gestión.

Hay que alentar a los participantes.

Hay que dar rienda suelta a las ideas colectivas (brainstorming) y debates en grupos reducidos y usar interrogatorios para instar a los participantes a intervenir en el debate, compartir experiencias e intercambiar opiniones.

Intercambiar experiencias, compartir conocimientos, resolver problemas colectivamente y comparar puntos de vista, en lugar de impartir ideas en una sola dirección, a la manera de “conferencia magistral”.

Hay que brindar asesoramiento sobre la pequeña empresa a los participantes, ayudándolos a definir y analizar sus propios problemas, buscar soluciones y formular la acción requerida.

Alberto Aguelo
http://www.empresadehoy.com

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